Ecuador 1997
por Jesús Nicolás Sánchez Sánchez
fotografias: Jesús Nicolás Sánchez Sánchez
Participantes
Inmaculada Rodríguez Arroyo.
Jesús Nicolás Sánchez Sánchez.
Fechas
Del 6 de febrero al 8 de marzo
Objetivos
Cayambe (5.790 m), Cotopaxi (5.897 m) y Chimborazo (6.310 m) principalmente, junto con algún volcán de menor altura para aclimatar.
Cumbres
Imbabura (4.609 m.)
Descripción
Tan sólo dos meses después de haber regresado de Nepal, se marchan de nuevo los dos solos, esta vez a Ecuador. Salen el 6 y llegan a Quito al día siguiente. El día 9 ya están en la población de Tulcán, próxima a la frontera con Colombia, para intentar el volcán Chiles, de 4.768 m. En la jornada del 10, a pesar de no haber dejado de llover desde hace muchas horas, parten en un taxi a las 6:00 a.m. con dirección a la base del volcán, distante una hora en coche (24 km.), aunque desisten y no comienzan la ascensión. Desde aquí se trasladan a Ibarra para intentar el Imbabura (4.609 m), pero el día continúa encapotado, lo mismo que el 
siguiente, en el que se trasladan hasta La Esperanza. El jueves 13 está despejado el cielo a las 6:30 a.m., por lo que media hora más tarde salen para arriba. Se adentran en el laberinto de canales y pináculos de la parte final, en medio de la niebla colocando hitos para no perderse en el descenso. Llegan a la supuesta cumbre principal en algo menos de 5 horas, aunque después de estar allí casi una hora les parece que otro pináculo próximo que se intuye entre la niebla es la verdadera cima del volcán. Tampoco tienen especial interés en comprobarlo y descienden.
En la jornada siguiente, día 14, se trasladan hasta el pueblo de Cayambe, para intentar el Volcán Cayambe (5.790 m), tercera cumbre del país (ver ruta). El 15 una furgoneta les deja cerca del Refg. Berge-Oleas-Ruales (4.600 m), partiendo para la cumbre esa misma noche a las 23:00 p.m., con cielo despejado. Están ellos solos en la montaña y no hay 
trazas en el glaciar que les ayude a orientarse en la oscuridad. Con un glaciar absolutamente blando, ya que no hiela por la noche, con el peligro y la tensión que ello representa, van ascendiendo a la vez que el tiempo empeora. La repentina ventisca del amanecer empeora mucho las cosas y para cuando Jesús N. pisa las huellas que Inmaculada R. va haciendo 15 metros por delante de él -la distancia del encordamiento-, éstas ya están casi tapadas por completo, por lo que se dan la vuelta a las 6:30 a.m. a unos 5.600 m., ya muy cerca de la cumbre. Con el rastro de la subida borrado a trozos, descienden corriendo en una hora en medio del vendaval lo que les había costado 7h 30′ de subida.
Desesperados por el mal tiempo que están teniendo en este viaje, se van para el Refg. José Ribas del Cotopaxi (5.897 m) a donde suben desde Latacunga el día 20. El tiempo está siendo muy malo y esa noche arrecia un verdadero vendaval que parece querer arrancar el tejado del refugio. Deberán esperar otra noche más para intentarlo. A las 13:15 de la madrugada del 21 al 22 salen para arriba, junto con otras cordadas. De nuevo, cuando amanece a eso de las 6:00 a.m. la ventisca se intensifica igual que en el Cayambe y, pasada incluso la Pared de Yanasacha y a escasos metros de desnivel de la cumbre, deben darse la vuelta todas las cordadas a las 6:30 a.m., a una
hora u hora y media del final, aproximadamente.
Ante la continua mala climatología, optan por dedicar el resto del viaje a hacer turismo, lo que a la postre sería más positivo, pues en los 5 días que estuvieron por los alrededores del Chimborazo (6.310 m.), máxima altura de Ecuador en ningún momento llegaron a ver más allá de los extremos inferiores de los glaciares.
Con esto, el viaje concluyó en Barajas el 8 de marzo.