Dômes de Miage (3.670, via normal por Col des Dômes)

por Javier Rodríguez Vázquez de Aldana
fotografias: Javier Rodríguez Vázquez de Aldana

La fascinante estética de las Dômes de Miage y la relativa sencillez de su recorrido, hacen que sean unas cumbres bastante frecuentadas del macizo del Mont Blanc a pesar del fuerte desnivel que se debe salvar para ello (no hay medios mecánicos que lo acorten). A la ascensión no le falta nada: bosque de coníferas, pastizal alpino, morrenas, glaciares, nieve, arista de nieve, roca… Vivaquearemos en las proximidades del antiguo emplazamiento del refugio Conscrites, bastante más arriba en el valle que su ubicación actual, junto al glaciar de Tré la Tête.

En Le Cugnon (1180 m, valle de Chamonix) encontraremos un gran parking donde dejar el coche. De la parte superior del mismo, sale el sendero que se dirige hacia el hotel Tré la Tête (1970 m). La ascensión por el bosque de píceas, alerces y tejos es muy bonita, y aunque aparecerán varias bifurcaciones, las direcciones está perfectamente indicadas. En un par de horas habremos llegado al hotel. Continuamos por una zona de pastizal con una flora muy variada y donde fácilmente podremos ver algún rebeco. Con el frente glaciar ya delante de nosotros, el camino desciende hacia él.

La superficie de la zona terminal del glaciar se encuentra cubierta de derrubios rocosos. Ascenderemos por ella siguiendo la línea de hitos que nos conduce hacia su centro. Se supera así una primera cascada de seracs y pronto nos dirigiremos hacia la superficie del glaciar donde ya aflora el hielo. Los hitos nos llevan a la margen derecha (orográfica) del glaciar, al punto en el que parte la intrincada e inestable senda de ascenso al nuevo refugio Conscrites. Nosotros seguimos por el glaciar hasta alcanzar la parte superior de la cascada de seracs. Una vez arriba, continuamos un trecho por la morrena lateral (muy incómoda), y pronto volvemos al glaciar, a saltar y bordear numerosas grietas. Un poco más arriba la superficie se aplana y avanzamos con más facilidad, hasta superar una pronunciada curva del glaciar; si vamos atentos, observaremos un hito muy evidente en la morrena lateral derecha. Este hito nos marca el antiguo emplazamiento del refugio (2730 m), y hacia él nos dirigimos saliendo del glaciar en cuanto podamos. Cerca de este hito se encuentran los restos del refugio y existen varios emplazamientos apropiados para el vivac. Hemos tardado unas 6 h 30 min en total. Con el glaciar en mejores condiciones, el tiempo se puede reducir considerablemente. El Dôme de Neige, la Lée Blanche, Las Aiguilles de Tré la Tête y el glaciar, conforman un espectáculo soberbio.

Desde el vivac se asciende por la morrena, donde encontraremos algunos hitos que nos conducirán al glaciar a una altura ya cercana a los 3000 m. La primera parte está poco agrietada y la pendiente es suave, pero se va acentuando gradualmente. Ya en el plateau superior, podemos encontrar algunas grietas grandes que tendremos que sortear. Vemos ya de frente el Col Infranchissable y detrás la mole del Mont Blanc. Nosotros nos dirigimos hacia el Col des Dômes, ascendiendo por un glaciar secundario (grietas grandes en la mitad inferior) que nos deja entre la primera y segunda Dôme. Si no queremos hacer la cumbre de la primera Dôme, desde el collado continuaremos por la cresta en dirección sudoeste, ya sin posibilidad de pérdida. Comienza aquí la parte más espectacular y aérea del recorrido: la famosa arista de nieve de las Dômes.

Desde el vivac hasta la última Dôme (occidental, 3670 m) tardamos 4h 20min., cargando con todo el material del vivac. Aquí comienza el descenso hacia el Col de la Bérangère (3348 m), primero por la arista para después continuar por una fuerte pendiente orientada al O (hacia el glaciar d’Armancette, unos 45º) que podemos encontrar helada. Desde el Col, se asciende por la arista Nordeste de la Aiguille de la Bérangère (terreno mixto y descompuesto) y en una corta trepada alcanzaremos su cumbre (3425 m, 1h 15min. desde la última Dôme). Bajamos por las rocas unos metros (dirección Sur) para entrar en el pequeño glaciar de la Bérangère, que recorreremos hasta su parte inferior. Una vez fuera de él, los numerosos hitos existentes nos conducirán hacia el refugio Conscrites. El camino de bajada hasta el glaciar de Tré la Tête está bien indicado, pero la parte final del descenso está muy descompuesta y es peligrosa, sobre todo si tenemos gente por encima. Se encuentra equipada con pasamos y cadenas. El itinerario desde el glaciar, es el mismo que en el ascenso. Sin contar con las paradas, nos puede llevar 4 horas bajar desde la Bérangère hasta el coche.