Patagonia, las leyes de la Alta Montaña.

Desde 26noticias.com.ar nos llega la noticia de la publicación de un libro que trata sobre la repercusión que tiene la actividad montañera en la Alta montaña. El libro titulado Patagonia, las leyes de la Alta Montaña, obra de Santiago de la Vega, en colaboración con Marcela Ferreyra y Claudio Chehébar, expone las medidas que debiera tomar cada montañero para evitar dañar tan frágil ecosistema.La obra se podria resumir con el lema «No deje signos de que usted haya estado alguna vez en el lugar»

«Los ambientes de Alta Montaña están catalogados entre los más frágiles, por lo mucho que tardan en recuperarse una vez que son dañados»

«El paso de los caminantes es una de las amenazas y la otra es la basura que queda, especialmente todos los desechos humanos», explicó la bióloga y colaboradora en la realización del libro, Marcela Ferreyra.

La explicación se encuentra en el clima. La poca actividad bacteriana a causa del frío hace que la materia fecal quede estacionada en el lugar por años. En el Aconcagua encontraron la solución, según contó la especialista.

«En el Parque Aconcagua ahora es obligatorio bajar con la materia fecal, para lo cual entregan unas bolsas, que al llegar abajo se les controla la numeración y se las pesa. Hay todo un control para estas evacuaciones», precisó.

Sin duda esta medida incentivará las ascensiones en estilo alpino. Cuanto menos tiempo en altura menos carga que bajar.

Para evitar estos y otros impactos en el ambiente de Alta Montaña, los autores elaboraron una serie de recomendaciones para aquellos que se aventuren hacia las alturas.

Entre algunas de ellas, la de planificar las salidas y que éstas sean de menos de 10 personas, con el objetivo de generar menos impacto, además de buscar información sobre las condiciones climáticas para escoger el equipamiento necesario y hacer un mejor y más adecuado uso del lugar.

En cuanto al equipo, el libro aconseja contar con los elementos indispensables como calentador de montaña, puesto que está prohibido hacer fuego en la alta montaña, y envases para transportar y almacenar agua.

La comida debe ser liviana y hay que evitar envases de vidrio y las latas. Todos los residuos producidos, tanto orgánicos como inorgánicos, deben regresar y nunca deben enterrarse o quemarse.

Llevar bolsas de residuos y no introducir especies no nativas del área a visitar debería ser algo incorporado a todo visitante de los ambientes de Alta Montaña, sin embargo, es una recomendación que también se explicita en el libro.

Una serie de recomendaciones bastante obvias pero que a menudo «son olvidadas» por bastante gente.

Así se van delineando una serie de recomendaciones para el caminar, tanto por senderos como a campo traviesa, para el acampe, para el fuego, para los aspectos sanitarios, para la relación con la fauna silvestre y para la escalada, así como unas normas de cortesía indispensables para la convivencia con los otros y con la naturaleza.

«Comencé a trabajar con Claudio Chehébar, que es director de la regional Patagonia de la Administración de Parques Nacionales, que es especialista en técnicas de bajo impacto. Esta ocupación nos llevó cinco años», dijo la especialista.

«Empezamos a probar las prácticas en el campo para ver si funcionaban -agregó-, y las consensuados entre el Club Andino y la Asociación Argentina de Guías de Montaña y salieron publicadas».

La publicación a la que refirió Ferreyra es el libro citado, recién salido de la imprenta, ya que fue publicado hace menos de un mes.

«Llegamos a un material bastante extenso que toca todos los puntos, desde como preparar el equipo para causar el menor impacto en la montaña, como cargar calentador de montaña, que ahora es una norma básica en todos lados, cargar el abrigo adecuado para que en caso de extrema urgencia tengas que hacer fuego, como llevar tus alimentos para generar menos desperdicios, y mucho más», destacó.

«No soy creyente, pero cuando la naturaleza te necesita en un sitio, te lleva y te facilita todo», se confesó esta bióloga cordobesa enamorada del paisaje del sur, quien sigue haciendo planes, como el proyecto para hacer el relevamiento de plantas de Alta Montaña en Lago Puelo.

«También de la delegación regional quieren que se haga un relevamiento en el Parque Perito Moreno, porque el año que viene hacemos el plan de manejo y lo único que falta es el detalle de las plantas de alta montaña», anunció.

«Como ellos tienen ahora un sistema de información de la biodiversidad y están tratando de hacer un banco de datos de todas las especies de Patagonia, y mi hobbie es hacerme listas de especies, las regalo ahí y ellos la incorporan en el banco y van haciendo los mapeos», señaló.

En un racconto desde su llegada a Bariloche, Ferreyra recordó que había conocido todos los volcanes, como el Copahue y el Lanín, y tuvo un recuerdo especial para el cambio del milenio, que la encontró junto a otros colegas brindando sobre el volcán Domuyo, considerado el techo de la Patagonia, por su más de 4.000 metros de altura.

En resumen, un libro con un planteamiento bastante interesante, en mi opinión. ¿Pensais igual?